En el Perú, casi no existen pintores que hayan representado a sus paisanos leyendo por placer o por cultivar su mente un libro en su casa, en el campo, en una biblioteca, etc. Una de esas muy escasas obras pictóricas que he encontrado al respecto, pero que no cumplen con todos los requisitos que indico se menciona en el libro Ignacio Merino. Pintor de historia 200 años, de Ricardo Kusunoki Rodríguez (es el que aparece al inicio de esta entrada), publicado por la Municipalidad Metropolitana de Lima.
Sobre el cuadro de Merino, Kusunoki señala lo siguiente:
En contraste con el dramatismo de la obra anterior, Merino concibió su segundo envío como una tranquila escena ambientada a inicios del siglo XVII. Se trataba del Cervantes leyendo el manuscrito de Don Quijote de la Mancha, conocido actualmente como La lectura de El Quijote [es el que aparece al inicio de esta entrada] (2017: 55).
Pero hay un detalle anacrónico deliberado a tomar en cuenta en el lienzo que Kusunoki revela:
En el cuadro, el piurano recrea el momento en que Miguel de Cervantes lee el manuscrito de su célebre novela a un grupo de notables presidido por su protector, el conde de Lemos. El pintor se concentra en imaginar las distintas reacciones que tuvieron los oyentes durante la primera lectura de El Quijote. De esta forma, la figura de Cervantes enfrentada a sus comentaristas constituye una suerte de símbolo del propio Merino, cuyos lienzos quedaban expuestos a las críticas del Salón [de 1861 en París, Francia, en donde el pintor peruano exhibía tres de sus obras]. Quizá por ello, el piurano prefirió obviar que el escritor ya había perdido uno de los brazos en la batalla de Lepanto cuando compuso su famosa novela, mostrándolo con el grave gesto de apoyar una mano sobre la mesa mientras con la otra sostiene el manuscrito (2017: 55 y 56).
Y como bien lo explica Kusunoki en las siguientes líneas, el que Merino haya pintado a Cervantes leyendo obedece a una tendencia de la época:
Obras como el Cervantes constituían las primeras incursiones serias de Merino en el llamado genre historique o «pintura de género histórico», una de las tendencias más prestigiosas del arte francés del periodo. En claro contraste con la pintura de historia más tradicional, inspirada en eventos dramáticos y trascendentales, esta forma de acercarse al pasado recreaba escenas anecdóticas protagonizadas por personajes por lo general anónimos. A través de este tipo de obras, los pintores buscaban desplegar su erudición por medio de una minuciosa reconstrucción de los aspectos más domésticos de la vida antigua (2017: 56).
La observación que haríamos aquí es que si bien la obra pertenece a un pintor peruano (se cumple ese primer requisito), quien lee en ese lienzo no es un poblador peruano (no se cumple este segundo requisito), sino un escritor español, lo que no le resta mérito a la obra, por cierto. Sin embargo, para lo que proponemos en este blog (que es fomentar la lectura), nos hubiera sido más útil un cuadro de un poblador peruano leyendo (que todavía no he encontrado).
Hay otro cuadro de Ignacio Merino titulado Apertura del testamento (ver imagen que antecede a este párrafo), en donde también aparece un hombre leyendo y además parece tratarse de un notario español de la época. Aunque en este caso no lee un libro, sino un testamento, lo que hace del acto de leer una actividad pragmática porque no se lee por placer o para adquirir una mayor cultura (es decir, no se cumple el tercer requisito que propongo), sino para informarse de algo muy específico y material como es la herencia obtenida por los familiares del fallecido a través de ese documento.
En el siguiente artículo de esta secuencia, veremos otras obras pictóricas de gente leyendo provenientes de pintores extranjeros que podrían servir de modelo referencial a los pintores peruanos cuando se animen a retratar a peruanos leyendo en ambientes privados o comunes por placer o por incrementar su cultura.
Si esta entrada ha sido de tu agrado o te ha sido útil, compártela con tus seres queridos.
_________________________________
Nota: La imagen del cuadro La lectura de El Quijote (1861), de Ignacio Merino, al inicio de esta entrada, fue tomada de la siguiente dirección electrónica: https://bit.ly/3tgH5W4 / Y la imagen del cuadro Apertura del testamento, de Ignacio Merino, casi al final de esta entrada, fue tomada de la siguiente dirección electrónica: https://bit.ly/3GZuLiH
Bibliografía
KUSUNOKI RODRÍGUEZ, Ricardo. Ignacio Merino. Pintor de historia 200 años. Lima: Municipalidad Metropolitana de Lima, 2017. Consultado el 30 de mayo del 2022 en https://bit.ly/3Nlf8o4
No hay comentarios.:
Publicar un comentario